A estas alturas del año, por costumbre,
por inducción publicitaria, por consumismo o por lo que sea,
se crea una idílica atmósfera de ensoñación, de humanidad
perfecta, de bondad… Este ambiente feliz suscita una plétora de emociones que nos envuelve a todos provocando en nosotros una sensibilidad especial.
Se acercan unas fechas muy entrañables en las
que los sentimientos están a flor de piel y el cuerpo pide
desear lo mejor para todos, pero sobre todo para los más cercanos.
Sin embargo, la cercanía no es sólo espacio físico;
no es algo tan frío y aséptico como la distancia tangible
entre dos puntos. A veces estamos más cerca de los que están
más lejos; todo depende de los lazos que nos una al otro, independientemente del lugar en el que esté.
Y el ejemplo palpable de todo esto es FEDAES, que se
ha conformado desde hace tiempo como una gran familia unida,
no por la enfermedad, sino por los robustos lazos de la fraternidad.
Porque la adversidad une tanto que crea fuertes vínculos de afecto cuasi familiares, tanto o más fuertes que los cromosómicos.
Es por ello que desde el corazón de esta familia,
el equipo que aglutina todo este entramado, el equipo
de trabajadores y voluntarios que organiza esta estructura a la
que tú y los demás aportáis calidez, quiere recordarte que ha trabajado estos últimos 365 días para ofrecerte el mejor servicio.
Este no ha sido un año fácil, pero a pesar de los
contratiempos sufridos, de los pocos y lentos avances
en la investigación, de la continua e imparable degeneración y
de las dolorosas ausencias irremplazables, debemos seguir adelante
en la lucha contra la ataxia, con la mirada al frente, siempre fija en la
meta, que ya hace 15 años nos propusimos, curarnos.
Un año más podemos decir bien fuerte
que no lo hemos logrado, pero que algo más cerca estamos.
Y porque, al fin y a la postre, vosotros sois nuestro
principal objetivo, queremos haceros llegar sus mejores
deseos para el año que va a comenzar. Que si no es el “definitivo”,
al menos sea venturoso y aceptablemente feliz para todos.
Y recuerda que no estaríamos
donde estamos, ni habríamos conseguido tanto sin ti.
Por eso queremos darte las gracias
por confiar en nosotros y en nuestro equipo.
¡Gracias por estar con nosotros!